Gran multitud de blogs han publicado este vídeo en los últimos días, así que por si alguno de mis lectores (que bien suena eso... xD) no lo ha visto, aquí os lo dejo para que flipéis un rato. Resulta que una persona se quedó atrapada 41 horas en un ascensor de Nueva York un viernes a última hora sin que nadie se diera cuenta, y no tenía encima ni el móvil, ni el reloj teniendo solamente tres cigarrilos y dos miseros caramelos. Tenemos la grabación gracias a las cámaras de seguridad, y se ha creado el vídeo condensando en time-lapse esos casi dos días en unos pocos minutos, siendo la velocidad de grabación de x40. En fin, aquí lo tenéis:
Alucinante, ¿verdad? En el artículo Up then Down de The New Yorker podemos leer historia completa, que sucedió en 1999. Resulta que la experiencia le causó un profundo trauma psicológico y nunca volvió a trabajar a lo que era su antigua oficina.
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